viernes, 23 de marzo de 2012

Adaptation

La obsesión de un guionista.

Ficha técnica:
·         Director: Spike Jonce
·         Reparto: Nilolas Cage, Meryl Streep, Chris Cooper, Tilda Swinton, Maggie Gyllenhaal, Cara Seymour, Brian Cox, Judy Greer. 
·         Año: 2002
·         País: EEUU
·         Productora: Columbia Pictures/ Intermedia.
·         Duración: 114 minutos


Una página en blanco y una historia anodina da como resultado la pesadilla de cualquier guionista. Esta situación es la que vive Charlie, encargado de adaptar el guión de una novela sacada de un artículo periodístico de éxito, cuyo tema principal, aparentemente son las orquídeas.

Aquí vemos a un atormentado y acomplejado Nicolas Cage, Charlie en la trama, acompañado de su hermano gemelo Donald (encarnado por él mismo). Ambos son víctimas de alopecia y un increíble sobre peso al que no estamos acostumbrados a ver al actor de Leaving Las Vegas. Centro de sus obsesiones, paranoias y eróticos sueños de Charlie, el hermano protagonista, será Meryl Streep, escritora de la novela que tiene que adaptar. Por la forma de ser de Charlie, en lugar de tener una evolución progresiva, todo acaecerá precipitadamente, sin dar tiempo al espectador a asimilar los cambios de unos personajes, en principio insulsos. Desde su incómodo escritorio, o mejor dicho, sitio donde escribe, se nos muestra lo ocurrido en el pasado, que poco a poco llega hasta el presente de la película. Dicho “escritorio” de forma indirecta nos muestra la personalidad de Charlie; usa como mesa una silla con muchas cosas encima y escribe desde otra silla a la vez más alta que sobre la que escribe, obligando a encorvarse y dar sensación de incomodidad, desorden, desesperación e incompetencia. Todo lo contrario que su otro yo, su gemelo el cual lleva una trayectoria más progresiva y ordenada aun teniendo la extraña costumbre de estar casi siempre sentado o tumbado en el suelo.  
En su obsesión de querer hacer un guión que hable de flores, solo de flores, descubrimos el tormento que puede llegar a ser la escritura de un guión y cómo funciona el mundo del cine, podría hablarse de metacine, cine dentro de otra película. Aquí se muestra como a la industria cinematográfica lo que le interesa es crear espectáculo y constantemente le dicen que enriquezca el guión, que hablando solo sobre flores no llegará a ningún sitio. Por otro lado vamos averiguando junto al protagonista las profundidades y verdaderos sentimientos e intenciones de los que aparentemente eran personas insulsas o graciosas en algún momento como el caso del cultivador y ladrón de flores. Charlie, que durante la película tiene un comportamiento pudiéndose clasificar como de lerdo, en el sentido de torpe o lento para hacer algo, junto a su hermano Donald verá que no es todo oro lo que reluce y que todo gira en torno a las pasiones más escondidas.

Tiene tintes de humor sobre todo en lo referido al personaje de Charlie, entre otras cosas por su torpeza en algunas situaciones; gran momento por ejemplo cuando pregunta en una conferencia sobre creación de guiones. Pero básicamente trata más la tragedia que la comedia, esto es visible en los últimos momentos de la película cuando todo da un giro radical, adentrándose los dos hermanos en la intimidad de la escritora. El momento tragicómico o mejor dicho por el orden de acontecimientos, cómico-trágico, es cuando ambos hermanos huyen en el coche. Momento en el que se pasa de la risa al acongoja del espectador tan rápido y brusco como una bofetada.
La voz de la conciencia de Charlie es de la que recibimos la mayor parte de la historia haciéndonos entrar desde el minuto uno dentro de sus pensamientos, reforzando la palabra mediante la imagen en negro. Durante las reconstrucciones de los hechos sucedidos en el pasado se nos interrumpe constantemente con hechos que ocurren en el presente y viceversa dejando al espectador a la espera de la resolución.

Son tantos las idas y venidas al pasado y presente, que la música aparte de ser escasa, casi que  no es apreciada en esta enrevesada trama. Predominan los espacios cerrados dando sensación claustrofóbica. Los espacios en el aire libre, sobre todo el lago o los manglares se reservan para momentos de mayor acción.

La historia nos cuenta lo complicado que puede llegar a ser escribir un relato cuando las musas de la inspiración no aparecen y muestra los cambios de comportamiento que puede tener cualquiera de forma inesperada, desinhibiéndose,  haciendo que en muy poco tiempo su vida cambie radicalmente. Lo que parecía pacífico y cómico se vuelve dañino, lo que por fin se une se separa, lo ridículo es admirado, y lo que está destinado al fracaso, triunfa.


martes, 20 de marzo de 2012

Ana y los lobos. (Carlos Saura 1972)

¿Dónde me he metido? Es lo primero que tuvo que pensar Ana, el personaje de Geraldine Chaplin al entrar en la casa donde es contratada como niñera. Niñera o cuidadora que puede extenderse a todos los habitantes de esa metafórica casa, no solo a las niñas. Ella es extranjera y es vista como algo nuevo, tentador, peligroso, que amenaza con la paz de la casa. Como cine metafórico que es, hace tener que leer más allá del simple argumento; niñera que llega a casa de locos, esa niñera es el extranjero que desde los sesenta comienza a entrar en España (la casa).

Los habitantes de la esa vivienda, ponen a pruebas los nervios tanto de Ana como de los espectadores que junto a ella viven las anormalidades de esa casa; El hijo mayor obsesionado con la ropa militar, el mediano padre de familia infiel, y el pequeño religioso incapaz de hacer nada sin la supervisión de la madre a la que aún “le sube la leche”. Se hace una mezcla tan delirante como cierta de la situación de España en ese momento y anteriores a la Transición. Estos tres hijos son un reflejo de los tres bastiones fundamentales en los que apoya el franquismo, que en la película está encarnado por la Madre, (Franco) de la que están pendientes de ella los hijos (Ejército, Familia e Iglesia).

Película escueta de música, se ciñe solo a la diegética, la que forma parte de la trama, siendo esto suficiente ya que aparece en momentos importantes y da mayor realismo dentro del gran simbolismo que rodea a las situaciones.

Cada hijo por separado y con sus obsesiones, son vistos por Ana como algo curioso, extraño, que rozan a veces lo ridículo y ella juega a seguirles sus fantasías. Pero la unión hace la fuerza y Ana será testigo principal de tal hecho.

Ana y los lobos es una historia que no deja indiferente a nadie y es muy difícil olvidar los pasajes que vive Ana ya sea por sorprendentes o desagradables. Hace reflexionar sobre cosas que por muy descabelladas que parezcan, en cierta medida, ocurrieron de verdad. Hace una radiografía de la forma de pensar y actuar de ciertas personas en una época de la Historia española.

(He intentado huir de la teoría de la asignatura impartida en "Historia del Cine español", pero creo que es imposible partir de cero al saber el trasfondo de la película)